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Este templo fue levantado sobre la base de otro románico, probablemente del siglo XIII, del que queda una ventana cegada en la fachada de la entrada y restos de algún muro, y lo más importante, la pila bautismal del siglo XIII de nuestra era.
La datación de la iglesia actual hay que hacerla en el siglo XVI aunque hay estudios que dan cuenta de la misma en el siglo XIV con añadidos posteriores.
El antiguo templo románico no pudó aguantar la debilidad del terreno arcilloso y arenoso con corrientes de aguas internas con una humedad elevadíma.
Es un edificio gótico decadente con piedra de sillería en columnas, esquinas y entrada; lo demás es piedra de mampostería.
La iglesia contiene un pozo oculto en el muro oeste.
Ubicada en "El Otero", es una construcción del Siglo XVI a la que se añade una torre de sillería en el año 1761.
Su planta es de salón con tres naves separadas por pilares que soportan bóvedas de crucería estrellada.
Portada de arco de medio punto. La puerta de entrada se encuentra situada al sur.
Las bóvedas presentan nervaduras estrelladas rematadas con rosetones de piedra tallada y que dan en ver que estuvieron policromados hace tiempo.
La torre se encuentra ubicada al oeste del templo adosada al mismo, en frente del altar mayor que da hacia el este.
En su interior destaca la capilla del licenciado Santos Bullón, Obispo de Barcelona y Señor de Sigüenza, con cúpula con linterna y escudo de los Bullón. Al lado de esta capilla se encuentra la pila bautismal románica del siglo XIII.
Es de destacar la talla del patrón de la localidad, San Antonio de Padua, del siglo XVIII.
A destacar también la cruz parroquial barroca del siglo XVIII.
Del siglo XVIII son:
-la capilla de los Enríquez, al lado del Evangelio.
-la sacristía,
-el atrio,
-la capilla de san Antonio, y
-la torre
En septiembre de 1809 tropas del ejército francés se afincan en Guardo, y lo hacen más concretamente en la iglesia de san Juan, como era costumbre del ejército invasor, la iglesia lo mismo les servía de caballerizas para el ganado como de cuartel para la tropa, estuvieron un mes y hubo suerte que no se llevaron nada valioso.
El terrateniene Pedro de Cossío, fallecido en 1815, está enterrado en sepultura de primer orden en la nave mayor de la iglesia de san Juan Evangelista.
En la semana santa de 1986 se vuelve a abrir al culto la iglesia de San Juan después de haber sido rehabilitada.
En 2.010 se realizan grandes obras en la iglesia, se empieza rehabilitando el tejado pero se descubre un desplazamiento de las columnas por lo que el arreglo ha tenido que ser mayor punteando las columnas y fijándols en la base y por hierros entre ellas.
TORRE ACTUAL DE LA IGLESIA DE SAN JUAN
En 1755, más concretamente el día 31 de octubre, se produce el famoso terremoto de Lisboa que afecta duramente a las tierras pelentinas hasta donde llegó sus efectos. Se dice que fruto de dicho terremoto la vieja torre de la iglesia se acabó de desmoronar.
En el año 1757 Francisco Santos Díez de Bullón obispo de Sigüenza nacido en Guardo, donó 2.000 ducados para la construcción de la actual torre. La torre llevaría dos campanas y un reloj de pared.
En realidad quien pagó fue el pueblo puesto que Francisco Bullón era beneficiado de preste de la iglesia de san Juan, es decir que recibía una parte de los diezmos pagados por los vecinos a la iglesia.
En el mismo año de 1.757 se comienza a levantar la torre, se conoce que el maestro de obra fue Bartolomé Alonso, vecino de Villanueva en la jurisdicción de Llanes.
La obra duró cuatro años es decir que se acabó en 1.761.
En 1.762 se compraron las campanas.
PILA BAUTISMAL ROMANICA
De origen románico y ubicada en la Iglesia de San Juan bautista, se encuentra la pila bautismal.
Es una hermoso pieza, robusta, de tipo cónico truncado, sin corvatura en su superficie y sin peana y soporte propio. A toda vuelta lleva una greca clásica. Posiblemente tallada por un artista local, supo darle a la pieza una gran expresividad y dramatismo.
En su talla podemos distinguir dos bandas diferenciadas. En la parte superior sus figuras están más trabajadas y de mayor volumen, destacando sus arcos rudimentarios con arcaduras en ángulo de caída a dos aguas, una figura de un centauro sagitario, un cuadrúpedo de mayor tamaño y una figura enigmática de hombre con las piernas abiertas y las manos apoyadas en el pubis. En la banda inferior se observan figuras dentro de las fosas, destacando entre ellas un personaje femenino, tumbado pero viva y en movimiento.
Todos sus personajes giran en torno de la vida (banda superior) y de la muerte (banda inferior), de difícil interpretación y difícil simbolismo.
La pieza -situada sobre una base octogonal moderna-aparece profusamente decorada, con una ornamentación irregularmente repartida en tres registros horizontales. El borde superior aparece decorado con una greca tratada con tal esquematismo que asemeja un rústico ajedrezado a base de varias filas de billetes.
En el perímetro de la copa encontramos una serie de figuras bajo arquerías que cobijan confusas representaciones: como por ejemplo una larga escena con la resurrección de los muertos en la zona inferior que combina otros personajes superiores (un ángel con un libro y otro ángel con cabeza de rapaz portando una cruz procesional), y dos leones alados.
La escena tiene que ver con El Juicio Final: en el registro inferior, la Resurrección de los Muertos, destacando el primer sarcófago, que con la cubierta parcialmente reitrada, permite la incorporación de una mujer, y de dos sepulcros más con un total de seis resucitados, frente a los que se alza una bestia alada y rampante.
Sobre la escena de los sarcófagos , en un registro diferente , aparecen las figuras aladas de un muy original Tetramorfos. Las cuatro figuras se disponen una detrás de otra y representan a los evangelistas: el ángel, San Mateo, el aguila antropomorfa con una cruz en las manos, San Juan, el león alado, San Marcos y el toro alado, San Lucas.
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